El tripartito impone a Burriana un incremento de la deuda que podría haber evitado pagando con los 1,3 millones de remanentes de tesorería.

La alcaldesa conoció en 2015 las dos sentencias que obligaban a pagar a Burriana pero prefirió gastar 974.006,07 euros en proyectos para su “lucimiento personal”

El tripartito que gobierna en Burriana conoció el 5 de noviembre y 11 de diciembre de 2015 el fallo de dos sentencias que le obligaban a pagar 1.062.3.801,26 euros por la expropiación de unos terrenos. Cuatro meses más tarde, el 7 de abril de 2016, la misma coalición de gobierno decidió gastar 974.006,07 euros en “proyectos personalistas” en lugar de “pagar las sentencias que habían dictado lostribunales”.

El grupo municipal del Partido Popular en Burriana ha puesto de manifiesto estos hechos para reprobar la “irresponsabilidad” de una amalgama de partidos “que antes de saldar las deudas del consistorio cuando tienen fondos, deciden concertar un préstamo e incrementar la deuda solo porque no quieren renunciar a su cuota de protagonismo y lucimiento personal. Eso sí, a costa de todos los vecinos de Burriana”.

Sabían que debían pagar estas sentencias. Eran conocedores de las mismas desde el pasado 5 de noviembre y 11 de diciembre, con un auto de la Sección Primera de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Supremo y una sentencia de la Sección Sexta de esta misma sala, respectivamente. Por tanto, no entendemos cómo, este pasado abril, con los fondos disponibles, ignoraron la sentencia para, ahora, incrementar la deuda a todos los vecinos.

Reconozco que hubiéramos entendido que los 974.006,07 euros que en ese pleno se aprobaron hubieran ido destinados a bajar impuestos, atender la emergencia social y generar empleo. No criticaríamos ahora esta intervención. Sin embargo, lamentablemente hoy se constata que fue una irresponsabilidad generar esta situación puesto que no solo no dedicaron ni un solo euro a políticas sociales, sino que los malgastaron en proyectos innecesarios.

Esta medida ha provocado que ahora el tripartito anuncie el incremento de la deuda municipal. Van a concertar un préstamo de un millón de euros para pagar un Justiprecio que podríamos haber saldado el pasado abril. Sin embargo, en lugar de hacerlo, ahora vamos a generar una carga más sobre Burriana que veremos qué consecuencias provoca sobre la sostenibilidad económica y el control de la regla del gasto, esa que la concejala de Hacienda, Cristina Rius, dice que 'se nos obliga desde arriba, .

Yo mismo  advertí de esta situación en pleno. Les reclamamos que realizaran una gestión responsable de los fondos de todos los vecinos, que no gastaran a manos llenas y que, sobre todo, invirtieran en los ciudadanos, generando ahorros en las economías domésticas. Sin embargo, tememos que la nueva política social que el gurú del PSPV en la provincia de Castellón, José Benlloch, ha impuesto a Vila-real, incrementando el 9,5% del IBI a los vecinos, se traslade ahora hasta nuestra ciudad y provoque más gasto a los vecinos por la incapacidad del tripartito. La misma que ya va a provocar más deuda a todos los contribuyentes.

Fuster (PP) anima a la alcaldesa de Burriana a atraer las empresas de Vila-real tras imponer Benlloch un incremento del 9,5% del IBI

La imposición de un 9,5% de subida del Impuesto de Bienes Inmueble que sufrirán todos los vecinos de Vila-real puede convertirse en una “oportunidad” para Burriana, ciudad vecina de este municipio. La alcaldesa de Burriana, Mª Josep Safont, debería dejar a un lado el color político que le une al alcalde de Vila-real, el también socialista José Benlloch, y aprovechar la posible fuga de capitales que la imposición de un incremento del 9,5% del IBI anunciada por líder socialista de Vila-real puede provocar entre las empresas que operan en el municipio.

Considero que “la asfixia fiscal” a la que Benlloch someterá a todos los contribuyentes de la ciudad puede convertirse en fuente de riqueza para Burriana. Desde el PP de Burriana ya planteamos la rebaja de un 1,93% del IBI a todos nuestros vecinos, pero visto que las políticas de izquierda, como hemos podido comprobar en Burriana, se niegan a rebajar impuestos, es el momento de ofrecernos como alternativa a quienes, como es el caso de muchos empresarios, se nieguen a sufrir este ataque fiscal.

Así las cosas, desde el PP de Burriana animamos a la alcaldesa a que estudie un plan industrial, del que se beneficien los negocios que ya están implantados en la ciudad pero a la que también puedan acogerse los nuevos capitales que lleguen de la “espantada” que una subida del calado de la aprobada por Benlloch puede generar entre los empresarios.

Desde que el pasado 13 de junio el pleno de investidura decidiera que a Burriana la gobernarían tres fuerzas de izquierda, PSPV, Compromís y Podemos, todavía estamos a la espera de que se fomenten acciones que conviertan a nuestra ciudad en un modelo económico, en un terreno inversor y en una plataforma de oportunidades.

Es nuestra obligación trabajar para desarrollar crecimiento, el que atraen las empresas con sus capitales, y el que otorga futuro y oportunidades a nuestros ciudadanos. En este sentido, y pese a que en un año hemos solo notado la falta de un liderazgo que debilita y bloquea la entrada de capital inversor, no queremos que esta sea la tónica de los próximos tres años, por lo que proponemos y animamos al tripartito a actuar y ofrecemos nuestra colaboración para que Burriana crezca y no se estanque.

Compromís subvencionará a la empresa que explote la guardería de Burriana mientras Marzà niega el bono infantil a las privadas

El grupo municipal del Partido Popular en Burriana hemos puesto  de manifiesto la “incoherencia” de Compromís, miembro de la coalición de gobierno de Burriana, que decide subvencionar a una empresa para explotar el servicio de Escuela Infantil Príncipe Felipe mientras su conseller de Educación, Vicent Marzà, niega al sector privado el bono infantil desde enero.

Por eso reprocho el doble lenguaje de la formación política que, de la mano del PSPV, garantizó que este servicio sería público y hoy llama a las empresas garantizando un ingreso de hasta 37.500 euros, el pago de la luz, el agua y 579 horas de limpieza. Y todo ello lo pagarán los ciudadanos de Burriana sin que el servicio priorice en ningún momento a menores cuyas familias tengan escasos recursos.

El pasado  lunes el regidor del PSPV, Javier Gual, recibió a los negocios privados que ofertan plazas de 0 a 3 años en la ciudad. En la reunión, el edil se comprometió a informar a la oposición del “malestar” que reina entre estos profesionales por la decisión del tripartito de financiar con fondos públicos la Príncipe Felipe. Sin embargo, lo cierto es que transcurrida la semana, no se nos ha citado ni informado en comisión de la citada reunión.

Las escuelas infantiles que ejercen su actividad en Burriana acusan al tripartito de provocar competencia desleal con su pliego de condiciones. Unas bases alejadas de las que promovió el Partido Popular durante el pasado mandato, pactadas con PSPV y Cibur, y en las que lejos de subvencionar a la empresa concesionaria, se establecía un canon de 18.000 euros que debía ingresar en las arcas municipales. Hoy el caso es precisamente el contrario, en lugar de percibir ingresos por este servicio, generaremos un gasto extra al municipio sin ni siquiera establecer criterios sociales para una actividad subvencionada por todos los vecinos.

Los vecinos de Burriana han notado el cambio de gobierno en el bolsillo

Ha pasado un año desde que se celebraran las elecciones municipales y autonómicas, y el cambio autodenominado 'necesario' lo han notado los vecinos en el bolsillo. Este año los vecinos pagan un 4% más de la tasa de basuras, se han negado a rebajar el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) y se ha creado una nueva tasa por renovación de nichos para recaudar 70.000 euros.

Dudamos que este fuera el cambio necesario, sobre todo habiendo dejado una hacienda saneada con la que hoy financian sus proyectos. Una batería de acciones que, ha arrinconado a las personas, aquellas a las que su lema de campaña pretendían rescatar, y a las que, sin embargo, han engañado. Hoy su lema, “Salvem a les persones” se ha traducido en otro objetivo “Enganyem a les persones”.

Un engaño que, en mi opinión, se ha reflejado en incumplimientos tan flagrantes como la anunciada renuncia de asesores o la rebaja de sueldos que siguen manteniendo. O su garantía del sistema público, que en un año ha quedado diluida en agua de borrajas. Hoy abrazan al sector privado hasta el punto de regalar servicios generando malestar por competencia desleal.

Estas decisiones demuestran que el mensaje que hace exactamente un año nos vendieron los partidos de izquierda, PSPV, Compromís y Podemos, estaba carente de contenido. En el caso de Burriana, el pretendido rescate social no se ha traducido en un incremento de los fondos para emergencia social, no se han abierto los comedores escolares para resolver la desnutrición con la que alarmaban, y tampoco se han reducido los impuestos a las familias con un criterios proporcionales y justos, como exigían.

Por otro lado, en materia de empleo, según el último registro del Servef, son 3.244 vecinos los que sufren el drama del paro, y el pasado año a Compromís abandonó a 18 vecinos que podrían haber trabajado gracias a la subvención del Gobierno Provincial que el partido de Granel rechazó. Un año después ha quedado clara cuál es su política de contratación, la que designa a dedo, la que decide aprovechar los fondos dirigidos a financiar libros para sanear la hacienda local, la que no les impide reclamar 31,54 euros para costearse la gasolina por desplazamientos a la playa de Burriana.

El tripartito incumple su promesa de aplicar “impuestos justos y proporcionales” porque según Rius “las familias no piden rebajas

El tripartito que gobierna en Burriana con el liderazgo del PSPV y el apoyo de Compromís y Podemos ha incumplido su promesa de aplicar impuestos justos y proporcionales en función de su capacidad económica. La medida está recogida en el documento que el “Rescat ciutadà”, firmado por las tres formaciones políticas, establece en su punto relativo a Impuestos justos y proporcionales a la capacidad socieconómica.

La regidora socialista de Hacienda, Cristina Rius, ha transmitido este jueves al grupo municipal del Partido Popular que se niega a dar respuesta por escrito a la consulta registrada el pasado 11 de marzo y que según el Reglamento de Organización y Funcionamiento (ROF) debería haber respondido en un plazo de 5 días hábiles.

La regidora nos ha instado a que revisemos los plenos para obtener respuesta. Un trabajo que no tenemos ningún problema en hacer por ella, que parece demasiado ocupada en sus tareas, aunque no sean las de bajar impuestos, como anunciaron en su hoja de ruta política

Efectivamente, en el pleno de 29 de octubre de 2015, la regidora de Hacienda reconoce que la medida anunciada no se aplicará porque “en ningún momento las familias han dicho que quieren que les rebajemos 8 euros el IBI, en ningún momento”. Según las palabras de Rius del pasado año “hemos de entender que los vecinos de Burriana no quieren que se les rebajen los impuestos, lo que sencillamente resulta un despropósito”.

En mi opinión, lo cierto es que el tripartito está aplicando una política de gastos frente a la de ahorros a las familias. La que ha provocado que descartaran la rebaja de un 1,93% del IBI, la congelación de la tasa de basuras y la reducción de un 5% de la tasa de vados que propusimos en 2015. Rebajas “que han descartado para aplicar una subida de la tasa de basuras y la aplicación de una nueva tasa, la de renovación de nichos del cementerio.

La alcadesa, pagará a la empresa que explote la guardería, luz, agua y 579 horas de limpieza además de hasta 37.500 euros por alumnado

El tripartito que gobierna en Burriana bajo el liderazgo de la alcaldesa socialista, Mª José Safont, pagará a la empresa que se adjudique la gestión interesada de la guardería Infante Felipe de la localidad los gastos de luz, agua y 579 horas de limpieza, además de los hasta 37.500 euros que podrá cobrar por el alumnado.

El procedimiento abierto por el PSPV, con el apoyo de Compromís y Podemos, privatiza un servicio al que el consistorio financia parcialmente para mantener abierto el servicio. Lo hace después de que la alcaldesa frenara en 2015 la adjudicación del servicio a una empresa que asumía la gestión del servicio, los gastos derivados del mismo, así como abonaba un canon de 18.000 euros al consistorio con carácter anual.

De aquel pliego, que llegó a tener adjudicatario y que finalmente desistió por la inacción de la alcaldesa, el tripartito que frenó la operación anunciando una gestión pública de la guardería, ha abrazado la privatización del servicio. De hecho, después de que la concesión del mismo quedara desierto, ahora plantean un pliego de condiciones que financia a la empresa que finalmente se adjudique la explotación de la guardería.

Nosotros queríamos que la guardería siguiera operando. Es por ello que licitamos su explotación y obtuvimos respuesta positiva de inversores privados que asumieron nuestras condiciones: pagar 18.000 euros al consistorio y, por supuesto, financiarse los gastos derivados del mantenimiento y suministro del servicio. Hoy, un año después, no sabemos si existen otros factores, pero sorprende que Safont anuncie que le pagará al empresario que explote la guardería el agua, la luz, 579 horas de limpieza y hasta 150 euros por niño hasta el máximo de 40 alumnos, es decir, un máximo de 37.500 euros. Nos sorprende.

Nuestra postura sería favorable a este tipo de gestión financiada con fondos públicos si estuviéramos hablando de un servicio que atiende a menores de familias con escasos recursos”. Sin embargo, estas condiciones se plantean sin que en el pliego se establezca que la prestación irá dirigida a atender estas necesidades extraordinarias. Sorprendente, en opinión mi opinión, de tres partidos que enarbolaron la defensa de lo público y lo social y que, tras un año de gestión, buscan a la desesperada a empresarios para prestar una atención que no tiene en cuenta las necesidades de familias en riesgo de exclusión social

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Palos en la rueda

El próximo viernes se cumple un año de las últimas elecciones municipales y autonómicas. Un año en el que se han producido muchos cambios. Los “necesarios”, o al menos así lo anunciaron quienes hoy nos gobiernan.

Lo cierto es que en esta batería de acciones emprendidas por la nueva política, no son pocos los palos que PSPV y Compromís, apoyados por Podemos, han puesto en la rueda del desarrollo. Aquella que hace un año rodaba sin trabas encaminada a poner la puntilla a una crisis que habían generado graves dificultades en las familias. Dramas que venían a rescatar las coaliciones y pactos que hoy nos gobiernan.

Pero los dichos, en ocasiones, se quedan en meras palabras. Titulares de prensa. Los mismos que anunciaron rescates y hoy provocan recortes. El de la sanidad pública de Castellón, que la consellera socialista de Sanidad, Carmen Montón, se empeña en laminar. Disciplinada, Montón ha cerrado el banco de sangre de Castellón, ha pretendido desmantelar el CICU y ha provocado ceses en el Hospital General. Una eficacia contrastada que le ha permitido promocionar en Madrid, al amparo del equipo ¿del cambio? de Sánchez.

Y mientras el PSPV se emplea en Sanidad, Compromís hace lo propio en sus carteras. Con un ataque frontal a la libertad de elección educativa de las familias, la que ha permitido que en Burriana más del 50% de la población escolar acuda a la concertada, Vicent Marzà se empeña en mermar los derechos ciudadanos mientras su líder, Mónica Oltra, cierra residencias.

Lo hacen quienes venían a salvar personas, los que iban a aplicar el rescate social. Los mismos que niegan fondos directos al Banco de Alimentos, Cáritas o Cruz Roja. Los dichos, que nada tienen que ver con los hechos.